Si tienes que gestionar varias direcciones de correo electrónico, no pierdas el tiempo mirándolas todas. Ponlas todas en el mismo sitio. Crea buzones y gestiona tus libretas de direcciones en función de ellos, más allá de la bandeja de salida y de entrada. Permita el acceso sólo a los usuarios que tengan la autorización adecuada. Proteja su información confidencial con facilidad asignando a cada usuario un perfil de derechos que corresponda a su nivel de acceso.